lunes, 31 de enero de 2011

La saga de la ciudad oscura - Tomo IV

Lo dice la contraportada: Toda saga necesita un final...
Todo llega en esta vida, sí, hasta la edición del final de la saga del inspector Serrano, de la cual pueden gozar desde ya si acuden a su librería más cercana. Por el módico precio de ocho leuros, pueden disfrutar de las dos últimas novelillas de nuestro héroe y, como se suele decir, cerrar el círculo.
Las historias que incluye el tomo IV son:
-Mil trescientos setenta y cinco: puro survival horror manchego. O sea, Serrano contra los walking dead de la sierra del Segura. El camino del héroe pasa por enfrentarse a la muerte en su faceta más fea...
-El dios del crepúsculo: el final de los finales. El apocalipsis.La fin de los días. El Ragnarok, El día del juicio final. La venida del gran Cthulhu (en su versión albaceteña).
Como ya dije en post anteriores, voy a preparar un puñado de packs con la serie completa -los cuatro tomos- a un precio que rondará los 30 leuros. Como no habrá más de veinte, sus existencias estarán bastante limitadas así que quien esté interesado que me lo vaya diciendo. Por cierto que, salvo el tomo I, no existe ningún problema para conseguir sueltos el resto de libricos.
Ns’hagahd viene a por ti y a por tus  deuvedés de Deadwood...
En principio, está prevista una firma de ejemplares el próximo sábado 12 de febrero, en horario de mañanas (creo), en la tienda de cómics COMIKERS (Avenida de España, 3), donde el amigo Peralta y yo sus esperaremos con los brazos y los bolsillos abiertos.
Y es más que probable que a finales de mes, el viernes 25, si mi cuadrante no me engaña, se haga una presentación con charleta, cervezas y cena en el chino. Dónde y en qué chino, lo iremos viendo.

miércoles, 26 de enero de 2011

Leo aquí, sin dar crédito, que la RAE ha aceptado en el diccionario los palabros murciégalo (murciélago), toballa (toalla) o almóndiga (albóndiga). Y si no me creen, o piensan que las capturas de pantalla de http://elblogdeglendon.blogspot.com son un fake, vayan a http://www.rae.es/rae.html y compruébenlo con sus mismos ojos.
Después de lo de la tilde de sólo, guión y otros tantos desmanes presentes en la Ortografía, que me estaba leyendo, pero que voy a optar por usarla para limpiarme el culo, me encuentro con que los lumbreras académicos -o eso, o ha sido un hacker lingüista- admiten -¿asesorados por los guionistas de Aída?- como buenos estos palabrotos, de los que nos hemos reído toda la vida.
Pues ea, señores de la RAE, aquí les dejo más catetismos de estos para la próxima edición del diccionario:
afoto
almóndriga
amoto
arradio
cobete
diameda (diadema)
estijeras
fragoneta
linotipia (lipotimia)
macolotón
moñeca
retulador
utubús
Si tienes más aportaciones, déjalas en los comentarios...

sábado, 22 de enero de 2011

Comienza la cuentatrás

La segunda se refiere a la saga en sí, y sobre todo a la escasez de existencias del tomo I. Como es de imaginar, desde la fecha de su publicación hasta ahora casi toda la tirada inicial se ha ido vendiendo, por goteo, pero vendiendo. Los siguientes han tenido menos suerte, por unas cosas u otras, pero el caso es que de ese primer libro rojo no quedan apenas más de veinte unidades. Ante la imposibilidad de asumir una reimpresión -sería un suicidio económico-, el problema que se me presenta es doble puesto que, así las cosas, es imposible captar lectores para la saga desde cero, y además las librerías quieren la colección completa (los cuatro tomos). La decisión que he decidido tomar es NO vender sueltos esos veintipocos tomos I, sino metidos en un pack con el resto de la serie. Es decir, puedes comprar el II, el III y el IV por separado, o todos a la vez más el primero.
Pues esta tarde he hablado con la imprenta y me han asegurado que el tomo IV del Serrano estará para el próximo viernes 28, así que para el fin de semana, con suerte, podré llevar ejemplares a las librerías para todo aquel fan y completista de La Saga de la Ciudad Oscura. El precio, pues supongo que como el anterior, unos 7 u 8 leuros (la crisis).
Hay dos cuestiones que hay que dejar claras desde ya. La primera, es que esto se acabó. No habrá más aventuras del inspector Serrano, ni ya puestos, libros autoeditados. Las ocho novelas recogidas en cuatro tomitos bolsilibreros me ha supuesto un esfuerzo tal, a lo largo de diez años, que me ha dejado agotado. Cierro el chamizo, y sólo el dinero, de otros se entiende, podría hacerme volver a este personaje y su mundo. Al menos eso es lo que pienso hoy por hoy. Hice una apuesta en su día y ha llegado la hora de ver si la he ganado o perdido. La apuesta, digo.
El precio del pack no lo tengo claro. Por un lado, como ocurre con las cartas de Magic, su rareza y  exclusividad me incitan al alza. Por otro, no me gusta estafar al personal. Supongo que lo justo serían 30 leuros o así... Otra cuestión es que en cuanto tenga preparados los packs veré si los llevo salomónicamente a librerías o los vendo yo mismo.SI hay alguien interesado, que me mande un correo.
Pero este tampoco será el fin de este trabajo. Primero, estoy preparando, y llevará tiempo, una edición de las ocho novelas en formato libros por demanda tipo Lulu.com o Bubok. En cuanto haga mis cuentas y saque tiempo para maquetar y hacer las portadas los pondré a disposición de todo el mundo. Si alguien lo quiere así, que lo pague y que se lo manden. Será caro, lo advierto, y no por culpa mía, sino porque esta gente trabaja así. Edición Deluxe, ea.
También me prometí a mí mismo convertir toda la saga a formato ebook y ponerla a la venta. Estoy muy a favor de este nuevo formato y de sus posibilidades y trataré de hacerme un hueco en el mercado del libro electrónico, puesto que los grandes no mueven ficha. El problema es que todavía no controlo el tema de los formatos, puesto que hasta hace unos meses pensaba que el .epub era el formato a ganar, y ahora estoy probando las virtudes del .mobi. Luego está el tema de cómo gestionar la venta de estas cosas (pensaba ponerlas a un euro cada una...), amén de que en cuanto esté en la red, estaré a merced de la descarga directa, auque ahora mismo me suena hasta presuntuoso pensar que alguien busque mis novelas para descargarselas gratis...
Como veis, el tomo final es más final que nunca. Espero que os guste!!!

jueves, 20 de enero de 2011

ALA en Madrid

A estas alturas todos deberíais saber que el próximo viernes, día 21 de enero de 2010, el señor Alberto López Aroca estará en la madrileña librería ESTUDIO EN ESCARLATA (calle Guzmán el Bueno nº46, esquina con Fernández de los Ríos; metro Moncloa), a las 19.30 horas, para presentar su nueva novela, SHERLOCK HOLMES Y LOS ZOMBIS DE CAMFORD. El evento contará con la presencia del insigne Borja Crespo. Tertulia sherlockiana y worldnewtoniana, frikeces en general, cervezas en los bares y cigarros en la rua aseguradas. Y algunos zombis.
Hale, amigos de la capital del Reino, ya estais tardando.
Como ilustración de esta noticia os mando al enlace http://www.chrissamnee.com/2010/03/detective-chimp-and-case-of-bipedal.html -no la pongo por cosas del copyright-, pero merece la pena.
Es que -spoiler- además de zombis, en la novela de Alberto salen monos...

martes, 18 de enero de 2011

El Grecazo

Ya estábamos echando de menos -en realidad en Albacete no, con toda esta historia del Quinto centenario de la Feria-, que quienes nos gobiernan se sacasen de la manga alguna efeméride para darnos por saco, sacarnos los cuartos y promocionarse a costa de algún artista muerto. Pues bien, después del IV Centenario del Quijote, que no era del todo así, se han sacado de la manga el IV Centenario de la muerte del Greco para 2014. Supongo que era demasiado raro celebrar en 2015 los cuatro siglos de la segunda parte de lo de Cervantes, aunque seguro que no han acabado de descartarlo.
Pues hala, prepárense para las rutas y menús del Greco y demás merchandising del pintor que nos viene encima. Desde aquí les aconsejo que vayan pensado algo al respecto, algún producto greconiano, para pillar algo del pastel, que luego nos lamentamos de que siempre ganan dinero los mismos.

P.D: Versión gabacha:

Epa, que luego van al pan...

Rol-on

Un vistazo retrospectivo e íntimo a mi toma de contacto con el mundo del rol celebra las 45 entradas de la columna Sesenta mil satanases (publicada en http://enemigopequeno.blogspot.com/), lo que significa que está a punto de cumplir un año y de llegar a los 50, y la satisfacción de haber cumplido el objetivo de una entrada semanal. Este post adelantado dos semanas, dividido en dos por su extensión, puede que le traiga buenos recuerdos a más de un rolero de mi quinta.

Breve historia personal y rolera I (Sesenta mil satanases, 46)

Breve historia personal y rolera I (Sesenta mil satanases, 47)

 
El mejor juego. El mío está aún más hecho polvo.

Y de postre, un bailecico:


Breve historia personal y rolera 2 (Sesenta mil satanases, 47)

Y salió el HeroQuest, que no era rol, pero casi. Todos queríamos uno, pero sólo unos escogidos lo tuvieron. Yo me lo fabriqué. Mi buen amigo Carlos y yo conseguimos fotocopiar el reglamento, y con paciencia y maña recreamos el tablero y las losetas en cartulina, conseguimos figuras y disfrutamos del juego durante mucho tiempo. De hecho, compramos todas las expansiones y las incorporamos tranquilamente. Lástima que no conservemos apenas un par de orcos de plástico de todo aquello...
Los juegos de tablero con miniaturas como HeroQuest, Cruzada Estelar y Battletech fueron la puerta que llevó al grupo de amigos hacia el rol. Desempolvé el Traveller, nos sentamos alrededor de una mesa de comedor con unos dados, los míos, y unas hojas de personaje y ya está... Jugamos a Traveller campañas enteras durante años. Recreamos todas las películas, series, libros, y tebeos de ciencia ficción que habíamos visto y leído. Como en Star Trek, visitábamos el mundo del oeste, de los violentos años 20, del Impero Romano... de todo. Traveller era como un GURPS a nuestra medida sin límite. Como Máster, fusilé tablas y reglas de otros juegos para adaptarlas a este, ideé sobre la marcha aventuras sin apenas un plano o un PNJ, historias de investigación, horror cósmico, sexo y violencia... Sin usar jamás un suplemento ad hoc (aunque tengo todos los editados por DO, por puro coleccionismo), ni emplear las reglas de combate interestelar por ser un puto coñazo. El manual llegó a desencuadernarse y tuve que remendarlo como buenamente pude, sin que por ello dejásemos de echar la partida semanal, que en verano era casi diaria. Con Traveller vivimos el hito histórico de jubilar a los PJ porque ya no se podía llegar más alto.
El virus del rol se contagió al grupo y, poco a poco, fueron cayendo más juegos: Vampiro: La Mascarada, Kult, La llamada de Chtulhu, Killer, Mutantes en la sombra, James Bond, Mechwarrior, Shadowrun, Star Wars... También nos adentramos en el costoso mundo de W40K y sus codex sacacuartos (se puede apreciar que no éramos muy de Tolkien). A todos ellos apenas jugué más de una aventura, quizás porque era peor jugador que máster, quizás porque a esas alturas el gusanillo de las tías y las discotecas nos picaba demasiado fuerte. Por mi lado, compré (porque el original siempre era mejor que la fotocopia de tóner costroso) Paranoia (al que nunca llegamos a jugar más de una sesión, quizás porque tampoco le vimos la gracia), Far West (ja este sí le dimos buen uso; jugábamos a lo Leone, por lo que llevábamos un marcador de balas), Car Wars -que no es de rol, pero lo pillé porque me molaba su rollo madmaxnesco, y apenas tocamos porque el movimiento de los coches es un puto infierno de lentitud-, Cyberpunk -este fue el juego que terminó de matarnos; nos encantaba, pero incitaba demasiado a la masacre y nunca entendimos las reglas de la red-.
Como decía antes, he participado casi siempre como Director de Juego y apenas como PJ. En estos últimos casos, en la mayoría de las veces o me he enzarzado en discusiones absurdas con el máster, o mi personaje ha muerto a las primeras de cambio (el recórd lo tengo en una sesión del viejuno Warhammer RPG, donde un jabalí me destrozó a las primeras de cambio y luego un orco que pasaba por allí me dio el coup de grace. Tres días de creación de personaje para morir en una tarde). Es otro tema pendiente.
Cuando me hinché de enterrar PNJs de Cyberpunk, y los juegos de cartas, sobre todo el Doomtrooper, y las novias, los estudios y el alcohol reemplazaron al rol, se acabó. No he vuelto a jugar en quince años. De vez en cuando, como ahora mismo, me pica el gusanillo, y tiendo a releer el viejo Traveller, a buscar los manuales que entonces no pude comprar en pdf, a tantear en vano a los colegas... En los últimos años, los eurogames han llenado parte de ese vacío lúdico que tenía; aunque no es lo mismo, Carcassonne, Catán,Bohnanza y muchos otros han sido una forma de mantenerme ligado al mundillo de los juegos.
Echando la vista atrás, creo que aquella faceta de máster de rol entronca directamente con el oficio de escribir. En cierto modo, sigo ideando y narrando historias, de otro modo, por otros medios, pero no deja de ser una forma de jugar, para mí y para el lector -o eso espero-. De hecho, sigo tirando los dados para deshacer los nudos de la trama en mi cabeza. Los mismos dados que compré hace veinte años.


El Pueblo de Albacete, 30 de enero de 2011

Breve historia personal y rolera I (Sesenta mil satanases, 46)

Mi primera toma de contacto con los juegos de rol fue en la ya desaparecida tienda ComicRol, que como bien explica su nombre, estaba especializada en cómic y rol, así que cuando uno llegaba a comprarse su tebeo de mutantes, no podía dejar de ver aquellos tomos de sugerentes portadas que prometían una nueva forma de pasarlo bien. La tienda de Javi y Ciro también tenía wargames y figuricas warhamméricas, por lo que también podía haberme inclinado por cualquiera de esas vertientes lúdicas, pero supongo que mi ánimo narrativo me pedía leer una historia, más que avanzar armado por un tablero (lo que no quita que con el tiempo hiciera mis pinitos en Battletech, W40K, o Blood Bowl).
Sin acabar de entender cómo y por qué, aunque sospecho que sería por aquello de que jugar al rol estaba de moda entre los protofrikis de mi época, a mí aquella forma de entretenimiento me atraía muchísimo, a pesar de lo mucho que desconocía de este mundo. Creo que el primer juego de rol que tuve en mi poder fue el D&D edición Dalmau, a fotocopias de esas tan malas que se desprendía la tinta y se calcaban y se pegaban las páginas unas a otras, por lo que, con el paso de los años, su destino fue el contenedor de basura. Lo cierto es que nunca jugué, ni he jugado, a esta u otra versión de la creación de Gygax, no por nada, sino porque nunca surgió. Es un tema pendiente.
Durante meses acudí a la tienda a golismear entre los manuales que, por entonces, atiborraban los estantes de un rincón de la tienda, indagando sobre cuál de aquellos libros tendría más posibilidades en mis manos. El factor económico era decisivo, pues en mi casa no sobraba el dinero, y mucho menos para invertirlo en cosas de ocio (caprichos) -un concepto que los más jóvenes no entenderán-. También estaba el factor Millar. Hasta entonces, lo más caro que se compraba uno con lo poco que conseguía ahorrar costaba a lo sumo treinta o cuarenta duros (un tebeo). Superar la barrera de las mil pelas era raro. Rozar los mil duros era inaudito. Los juegos de rol eran caros para un chaval de primero de BUP de 1990.
También entonces, como ahora, me echaba para atrás el tener que comprarme un manual tras otro, como si se tratase de un juego por fascículos. Y como tercer factor esta el tema de los amigos... El rol no era un juego en solitario (para eso estaba los estupendos libros de Elige tu propia aventura), sino grupal. Necesitabas una buena provisión de colegas sin demasiada vida social para jugar, lo cual no era fácil de conseguir.
Busqué ayuda en las revistas del ramo, concretamente en la Líder, que tenía un precio aceptable y pensé que podía echarme una mano a la hora de decantarme en mi futura adquisición. Lo hizo. Un artículo sobre Traveller atrajo poderosamente mi atención. Como fan de la Ci-Fi, devoto de Asimov, de Star Trek (que la echaban por Canal Nou los fines de semana) y de las novelas de a duro de Torres Quesada y compañía, Traveller parecía tenerlo todo. Además, sólo tenía tres suplementos (en español, ni pensar en leer nada en inglés) que parecían innecesarios, y estaba editado por Diseños Orbitales (¡los de Battletech!).
Compré Traveller. Lo leí de cabo a rabo. Lo menos diez veces. Para los dungeoneros que nunca se han sentado a probarlo, les diré que más que un juego era un sistema muy sencillo (todas las tablas cabían en un par de folios), con una miaja de trasfondo, que me era muy familiar, dados los mencionados antecedentes. Ideal para novatos. Ahora Traveller nos parecería demasiado básico, crudo, escaso quizás, pero lo cierto es que dejaba la puerta abierta a un montón de posibilidades, es decir, a completar sus carencias con todo tipo de escenarios y reglas caseras, como así sucedió. Pero me estoy adelantando.
El juego durmió el sueño de los justos durante casi dos años porque no tenía con quien jugarlo. Esto no quiere decir que me olvidase del rol. Conseguí una copia de El Señor de los Anillos. Compré más Líder. Seguí husmeando entre las baldas de ComicRol las ediciones de Joc...

(Continúa...)

El Pueblo de Albacete, 23 de enero de 2011


lunes, 17 de enero de 2011

Holocausto conejo (Sesenta mil satanases, 45)

"A Rocco le faltaba la cabeza”, decía una conmocionada anciana de cabellos blancos y gruesas gafas de concha ante los micrófonos de la BBC este verano. La señora Elfriede Dumont, de 74 años, salió al patio para dar de comer a sus conejos, cuando le sorprendió ver que la puerta de la conejera estaba abierta. “Miré adentro y vi que estaba Rocco estirado. Le faltaba la cabeza. Más tarde me encontré con Felina entre los arbustos. También la habían matado. No entiendo por qué”.
Éste era el último caso del asesino en serie de conejos que llevaba sembrando el pánico entre los vecinos de valle de Ruhr (Alemania) desde hacía ya un año y del que se hacían eco, además de la televisión británica, los medios nacionales. Hasta entonces, el saldo oficial de víctimas conejiles en los últimos nueve meses ascendía a los 40 animales, todos ellos raptados en la noche y asesinados de forma brutal. La policía interpretó, en un principio, los secuestros y las muertes de estas mascotas como meros incidentes aislados, pero fue en primavera cuando el número de asesinatos se aceleró con cuatro nuevos casos en mayo. Luego, comenzó una espiral de sangre y mutilación sin sentido.
Uno de los incidentes más inquietantes ocurrió durante la Navidad de 2009, en un pueblo en las afueras de Dortmund. Cuando los dueños de un par de conejos reproductores fueron a alimentar a sus mascotas, se encontraron los cadáveres de los animales en el suelo, fuera de sus jaulas. Ambos estaban sin cabeza y sin sangre, en lo que parece el modus operandi favorito del criminal.
El agente Volker Schütte confirmaba el extraño patrón: “Siempre es lo mismo, se encuentra al conejo muerto en la conejera. Alguien les ha cortado la cabeza y los ha desangrado. Así que no encontramos ni sus cabezas, ni su sangre”. Otro escalofriante hallazgo se dio en el patio de una escuela, donde los niños que salieron a jugar en su periodo de recreo se toparon con los cuerpos de varios conejos decapitados.
A la luz de estos datos, los interrogantes se suceden atropelladamente. Entre otras cuestiones que torturan a los responsables del caso está con qué criterio selecciona el asesino a sus víctimas. Para la policía, se trata de un individuo o un grupo bien organizado. Schütte incluso apuntaba al empleo de las imágenes por satélite de Google Earth para ayudar a encontrar conejeras en la región, ya que no todo el mundo tiene una mascota de este tipo en su patio trasero, y muchas de las conejeras no se pueden ver desde la calle o la carretera. Vemos que la detallada planificación del crimen es escalofriante.
Éste es uno de los casos más impactantes de crueldad contra animales que pueden recordar los habitantes de estas poblaciones alemanas. Acaso pudieran encontrarse ciertas reminiscencias en una serie de brutales asesinatos de caballos en el oeste de Alemania hace casi una década. Un gran número de caballos fueron atacados y asesinados con cuchillos. Algunos fueron decapitados también. Los autores nunca fueron capturados.
Por ello, no es de extrañar que el miedo se haya apoderado de los vecinos, que temen por la vida de sus mascotas, y por las suyas propias, ante la posibilidad de que el asesino decida pasar a mayores. En un pueblo donde hasta hace bien poco se podía dejar la puerta abierta, desconcierta y aterroriza que haya personas que asesinen conejos.
Y mientras, quienes aman a estos animales llegan al extremo de fortificar sus patios, y convertir las jaulas en complicadas cajas fuertes, mantenidas casi en secreto, el departamento de policía ha establecido un grupo de cinco investigadores que trabajan a tiempo completo en el caso, con más de 300 personas interrogadas a la búsqueda de algún dato revelador. Pero nada. Tampoco las autopsias de los animales han ofrecido pistas o rastros de ADN del descuartizador de conejos.
Ni siquiera la recompensa de 2.500 euros, ofrecida por los grupos por los derechos de los animales de la región, ha servido para que el culpable sea detenido, si bien, la presencia mediática parece haber detenido su mano homicida, por el momento.
Se ha especulado con que grupos satanistas podrían ser los responsables de la ola de asesinatos de conejos. La pista del desangramiento de los animales ha empujado a varios expertos en cultos religiosos y sectas a señalar la posible recolección de plasma para algún tipo de ritual satánico, pero no es una hipótesis de trabajo que guste a las fuerzas de seguridad.
Mientras siga libre el asesino, los conejos del valle del Ruhr estarán obligados a vivir en la clandestinidad y con el miedo a que les corten la cabeza.

El Pueblo de Albacete, 16 de enero de 2011
La Gallina, 2010

jueves, 13 de enero de 2011

Himno para la Feria de Albacete 2011

Esta tarde ha presentado el ajuntamiento el cartel para la feria de este año (¿qué prisa había?).
Yo no quiero ser menos y, como albaceteño y jebi, no puedo menos que declarar al siguiente tema Himno Oficial de la Feria de Albacete 2011. Denle caña a los altoparlantes!

De paso, sugiero a los responsables de la carpa rock que vayan pensado en traerse al Reno Renardo para el fin de semana del 10-11 de septiembre, que creo que es el que libro. A ver si así puedo ir a un concierto.

Nena, que te como lo ¿azul?

Pues ya tenemos aquí la versión porno de los Simpsons, con actores pintados de amarillo y mucho cachondeo encima. Por aquí ya hemos hablado y visto los casos de Expediente X, Star Trek o Avatar, así que no podemos dejar pasar lo de los personajes de Springfield en modo copulatorio y real, que seguro superan con creces la calidad de las últimas temporadas.
Comprobadlo con vuestros propios ojos (y oídos):
http://www.simpsonsporno.org/

martes, 4 de enero de 2011

El legendario mono que fuma (Sesenta mil satanases, 44)

Si había en la infancia ochentera un animal más español y entrañable que el silueteado toro de Osborne en nuestros horizontes viarios, o el gorrino en sus múltiples despieces cárnicos, ese era el mono. A priori, puede resultar chocante esta afirmación, puesto que, salvo los macacos que roban y se cagan en los turistas de Gibraltar, los monos nunca han sido una especie autóctona de estos lares. Lo cierto es que la influencia de los primates se dejó notar, y mucho, en nuestro acervo cultural durante años, hasta que fueron reemplazados, sobre todo por la influencia anglosajona que nos vino de internet, por los gatos y los perros.
La invasión simia nos llegó en nuestra niñez, principalmente, a través de la pantalla. El pequeñote Amedio de Marco, la vivaracha Chita de las películas blanquinegras de Tarzán, el viejo salido de King Kong y el legendario mono Tobías de La Cometa Blanca, cuyo muñeco/marioneta se convirtió en objeto de deseo ferial mucho antes que la Chochona. En el campo del ocio, aparecía el gorila Donkey Kong, y no el fontanero italiano, como titular de esos primeros videojuegos en los que se entretenía tirando barriles a lo hooligan.
Ya entrando en el bizarrismo ilustrativo, estaban los chimpancés de calendarios y pósters, los cuales aparecían retratados en ademanes humanos para hacernos de reír y recordarnos que, en el fondo, todos venimos del mismo árbol. Especialmente famosa era la imagen del mono sentado en la taza del váter, que lo mismo adornaba la pared de un bar, que la de un taller junto al cardado en tetas de Samantha Fox.
Pero por encima de todos ellos, estaba el mono que fuma.
Místico animal de la talla del Ligre, y a la vez tan cercano y humano como tu tío de Valencia, con quien compartía demasiados rasgos, era habitual ver a este animal adicto a la nicotina —es de suponer que no existía un solo espécimen—, en circos y similares donde, tras los barrotes, o de la mano de un cuidador de astroso aspecto, el mono sostenía un cigarro cual Bogart peludo, y lo chupaba con deleite, y exhalaba señorial el humo, confirmando el mito de que un cigarrillo te hacía parecer interesante. Por supuesto, al mono podían darle también una cerveza, con lo que tras el Bisonte o el Celta de rigor, tenías el doble espectáculo de un animal practicando el fumeque y el bebercio como si se tratase de una persona.Ver a un mono —animal fetiche para los menores— practicar ese placer misterioso reservado a los adultos era una escena fascinante, hipnótica. O al menos lo era durante los primeros cinco minutos, pasados los cuales aquello comenzaba a perder efectividad y al final era como ver a un pariente del pueblo a la hora del aperitivo. Pero hasta la llegada del hastío, o la indiferencia, el mono que fuma era una distracción.
Extravagante, como los espectáculos de monstruos ambulantes, por el que había que pagar, yo al menos recuerdo abonar entrada por vislumbrar a este y a otros animales de parecida ralea. El que yo vi de chiquillo era un orangután de greñas rojizas, primo hermano del Clyde de Duro de pelar. Cogió un Ducados prendido y se puso a hacer anillos de humo azulado mientras se rascaba el culo con la otra mano. Hoy día sería impensable ver algo así fuera del youtube.
Monos fumadores ha habido desde que hay tabaco. Puede que el más mediático a escala mundial fuera Charlie, el chimpancé fumador, la atracción más grande del zoológico de Mangaung, Sudáfrica, que falleció este año. A pesar de la malignidad del tabaco, Charlie llegó a la edad de 52 años, diez años más de las expectativas de vida de un chimpancé, sin pagar una sola cajetilla. A Charlie, que sabía hasta encenderse los cigas, trataron de desintoxicarlo sin éxito, cuando fumar se convirtió en el globalizado octavo pecado capital y aquel show pasó de divertido a denigrante. Omega, otro monete de 12 años con idénticos hábitos tabaquistas que el sudafricano, y cuyo caso copó minutos en los telediarios este pasado 2010, tuvo más suerte, suponemos. Omega, cuyo peso ronda los 60 kilogramos, nunca subió a un árbol ni vio a otros chimpancés, pero con frecuencia fumaba los pitillos encendidos que los visitantes le lanzaban a su jaula de un zoológico en el Líbano.
Unos defensores de los animales pensaron que era un abuso lo que se le hacía y partieron a liberarlo, para enviarlo a un santuario en Brasil donde, en principio, no podrá fumar.
Famoso, a la par que demencial, es también el juguete del mono tocado con un fez que fuma, que muchos vimos en Los Simpson, y que realmente existe y se puede adquirir en Amazon por seis pavos, pese a las protestas de ciertos grupos de presión proanimales.
Pero sin duda, el ejemplo más épico y estrafalario de la relación entre el hombre y el mono fumador lo encontramos en la anécdota del avión XP-59A que recoge el blog http://newtonlaspelotas.blogspot.com/, donde -en 1943- una formación de cazas P-38 que sobrevolaba el desierto de Mojave, topó por accidente con un aparato que volaba ¡sin hélice! y tripulado por un mono con sombrero, que además fumaba un puro. El mono hizo un ademán con el sombrero, ante el pasmo general, y se alejó a una velocidad impresionante. El primate no era otra cosa que un piloto de pruebas disfrazado, por cuestiones de seguridad, a los mandos de un aparato pionero en el vuelo a reacción, pero esto lo supimos muchos años después.

El Pueblo de Albacete, 8 de enero de 2011
La Gallina 2010

Reto Fanzine 2023

 Bueno, pues parecía que no pero al final sí, así que... Queda convocada la 19 edición de nuestro Reto Fanzine para el VIERNES 29 de diciemb...